Así lo ha explicado el propio Ramón Arenas, al término de una de las reuniones “de crisis” en la que han analizado las últimas incidencias registradas y han previsto nuevas actuaciones. De acuerdo al informe manejado en dicho encuentro, el primer embate de la mar, durante la pasada madrugada, se ha logrado contener gracias a las barreras defensivas de dunas artificiales dispuestas a lo largo de la playa durante el pasado fin de semana. Su efectividad ha quedado acreditada en distintos puntos en los que, tras la pleamar, han quedado a la vista restos de espuma al otro lado de dichas barreras. Ello evidencia la magnitud del temporal, que se ha visto frenado en su ímpetu gracias a estos obstáculos de arena.

No obstante, el concejal del Mundo de la Mar se ha mostrado prudente, toda vez que para esta misma tarde se prevé una nueva pleamar con un coeficiente de 108 de marea, superior al de la pasada madrugada. El panorama es igual de incierto de cara a las próximas 24 horas. Todo ello lleva a apelar a la prudencia a la hora de hacer una valoración definitiva sobre los efectos reales de estas dunas levantadas para proteger el propio cordón dunar así como aquellos accesos a la playa que carecen de dichas defensas por ser lugar de tránsito de los bañistas.

Preocupación
Junto con este afán por preservar de la fuerza del mar la primera línea de costa a lo largo de los cuatro kilómetros de playa situados en la zona urbana, la principal preocupación se centra en la situación del Puntal y, en concreto, en el “Barlovento”. Estaconcesión hostelera, que ya quedó destrozada en el temporal de febrero de 2014, ha visto seriamente dañada su estructura durante la pasada madrugada. Parte de su solera ha vencido y el lateral más expuesto a la mar ha quedado, literalmente, en el aire. Ello ha llevado a la Guardia Civil a precintar el acceso a la explanada, así como a trazar un perímetro de seguridad en torno a dicha instalación.

Desde el Ayuntamiento de Laredo se ha redactado un informe, que ha sido cursado a las distintas administraciones con competencias en el lugar. A la espera de lo que resuelvan, se ha insistido en un llamamiento a la ciudadanía para que extreme la precaución y evite aproximarse a dicho lugar, ya que el riesgo de que una parte se derrumbe es “muy elevado”. Porello, el operativo prevé que agentes se encarguen de controlar el acceso al lugar para evitar males mayores. Asimismo, el operativo contempla la activación de un retén que pueda retirar cualquier tipo de elemento desprendido de dicho local que quede sobre el arenal una vez que finalice la pleamar.