El pintor Ángel Alonso, nacido en Laredo en 1923 y fallecido repentinamente en París en el año 1994, cuenta desde la semana pasada con una placa conmemorativa sobre la fachada del edificio que fue testigo de su nacimiento, situado en la calle Espíritu Santo.

Alonso huyó de España en 1947 durante la Guerra Civil, permaneciendo exiliado en Francia durante más de cuarenta años, país donde vivió sus últimos días. Fue unos años después de la muerte del artista en 1994 cuando su obra fue expuesta al público por la fundación Marcelino Botín durante una gran retrospectiva sobre el pintor realizada en 1996, movimiento al que posteriormente se unieron instituciones tan destacadas como el Instituto Cervantes de París, el Círculo de Bellas Artes de Madrid y alguna de las más prestigiosas galerías de arte de nuestro país.

El artesano ceramista José Manuel Rivas, presidente de la asociación Amonaval, ha sido el encargado de crear la placa en homenaje al pintor pejino. “Ha sido un trabajo artesanal laborioso”, indicó Rivas, que ha querido destacar el especial tratamiento aplicado a los materiales durante el proceso de creación de la misma.

El alcalde de la villa, Ángel Vega, ha mostrado su satisfacción con el trabajo del artesano, “no podíamos ejercer un homenaje mejor para el artista laredano que dedicarle a su nombre la labor artesanal de otro pejino”. Vega ha indicado además, que esta placa es un reconocimiento a uno de los muchos personajes notables que ha visto nacer nuestra villa, personas cuyo trabajo es fundamental “para conocer mejor el papel de Laredo y sus gentes a lo largo de la historia”.